Por Joaquin... "chin chin"

Hoy es el cumpleaños 60 de un tipo que me hizo pasar muy buenos momentos.

Hace tres años los festejó en Cuba. Recuerdo lo dicho en esa ocasión:

"El mundo está lleno de gente que canta mejor que yo, que escribe mejor que yo, que es mas joven y mas guapa que yo, incluso, que coge mejor que yo. Pero nadie ha elegido mejor que yo el sitio y la gente con que celebrar su cumpleaños".

"Yo no creo que Cuba sea el paraíso terrenal que imaginábamos todos hace treinta años; pero me resisto a pensar que es la mierda que retratan Bush y los que escriben a su dictado. Es una isla llena de contradicciones, y yo amo las contradicciones. Todo lo que pasa allí me parece una fuente maravillosa para discutir y para vivir. Sepan que si alguna vez me pierdo, ése es uno de los lugares donde deberían ir a buscarme".

Hoy no me interesa donde está, tampoco si continúa escribiendo sonetos, oraciones o canciones.

Brindo junto a Marianita, pues, su alma está presente en mi intima celebración, por las bellas canciones que nos regaló.

A continuación otra docena de frases extraidas de las maravillosas canciones de Joaquín Martínez Sabina.

De ti depende y de mí que entre los dos siga siendo ayer noche, hoy por la mañana.
Y si amanece por fin

Que se coman a besos las colegialas a los artistas
Que sufran por amores los dictadores y los notarios.
Esta noche contigo

Y yo que nunca tuve más religión que un cuerpo de mujer.
Medias negras

Las caricias que mojan la piel y la sangre amotinan se marchitan cuando las toca la sucia rutina.
Mentiras Piadosas

Y cada vez más tú
Y cada vez más yo
Sin rastros de nosotros
Amor se llama el juego

Y si de verdad me amas no habrá casorio ¿para que? con dos en una cama sobran testigos, cura y juez
Los cuentos que yo cuento

Porque todos los finales son el mismo repetido, y con tanto ruido, no escucharon el final.
Ruido

Bendita sea la boca que da besos y no traga monedas.
Jugar por jugar

Y regresé a la maldición del cajón sin su ropa, a la perdición de los bares de copas, a las cenicientas de saldo y esquina, y, por esas ventas del fino Laina, pagando las cuentas de gente sin alma que pierde la calma con la cocaína
19 dias y 500 noches

Las mejores promesas son esas que no hay que cumplir.
Yo también se jugarme la boca

Tu risa es una lagrima equivocada
Tu cama se inventó para no dormir.
Besos con sal

En mi casa no hay nada prohibido pero no vayas a enamorarte, con el alba tendrás que marcharte, para no volver olvidando que me has conocido que una vez estuviste en mi cama… hay caprichos de amor que una dama no debe tener.
Peor para el sol